lunes, 16 de junio de 2008

de vuolukiventie a talonpojantie pasando por madrid

hoy hace un mes que termino la semana en helsinki y desde entonces el tiempo voló para muchos y la intensidad de las horas creció. las noches no terminaban de llegar y las cenas se hacían multitudinarias, pasamos por un cine coreano, bailes en el redrum y habitaciones rojas, atardeceres en la playa y amaneceres llegando a casa; multas de autobús, cánticos de madrugada en el patio, visitas de la policía, festival de músicas del mundo, reencuentros desconocidos, el famoso grupo värttinä (opiácea cuéntate algo), calor, mudanzas, proyecto, reciclaje pagado, paseos por el bosque, botellones en el río, y entre todo esto despedidas, despedidas y mas despedidas; lagrimas, risas, besos, abrazos, canciones de campamento, because we are your friends…y fotos para siempre.

cada día pasaba algo y cada día faltaba alguien, las comidas del unicafe se fueron haciendo más pequeñas hasta que el sábado treinta y uno todos desaparecieron y yo con ellos; limpiando la h176 a última hora y volando para Madrid sabiendo que cuando volviese algo estaría cambiado.

y así fue, la vuelta al aeropuerto fue extraña, lo primero me esperaban tres perros que me pusieron el pulso al mil y yo con nada encima. me monté en el 519 camino de malmi, después el 79 y vuolukiventie pasó de largo.

llegue aquí, talonpojantie, el nuevo hogar, y marta esperándome en el cuarto con su pijama de setas y con un abrazote entre sus brazos. me puso al día de las cosas del piso, los compañeros, los dias y los últimos bye bye. me di una vuelta por el barrio, visita a jose, y los días siguientes pasaron como si nada, con la sensación de que me hubiese quedado aquella madrugada allí, en argumosa, viendo pasar el siguiente camión de la basura.

entre la confusión, paso un festival mas y la fiesta de la casa okupa; ambos me los perdí frente a este monitor, bajo las estrellas sin verlas.

el lunes me volví a poner las pilas con el proyecto. visita al tutor y una cita a ciegas con una de sus futuras doctoras en el museo ateneum; nuevas ideas, nuevos caminos y todo mas simplificado; esto empieza a coger color.
a la tarde, barbacoa cumpleañera en vuolu, dándole vida a la plaza y a alberto que estaba tan feliz de volver a ver gente, pudiendo escaparse a su cuarto para ver como italia caía en su primer partido en la eurocopa. mientras, últimos momentos de la common room, fotos en el armario y un porrillo por el día.

luego sin mas, marta se fue y no era consciente, ninguno lo éramos, pero se fue; cogio el autobús y desapareció medio erasmus. la noche de antes la pasamos junto a la hoguera, entre historias, abrazos whisky y jelovina; últimos momentos compartiendo habitación y muchas confesiones, muchas risas y la tristeza a un lado, que esto es para siempre.

al día siguiente mas conciertos; y es que tienen que comprimirlo todo en cuatro meses, doce meses de eventos en cuatro; a si que sin darte cuenta un día bajas al centro y te encuentras dos escenarios por que si; esta vez helsinki päivät (día de helsinki) y el descubrimiento de un grupazo y una reina que bien se podía llamar Leonor watling pero con nombre fines.

y el fin de semana rock, raina ja rakkaus ( rock, cuento y amor) mas conciertos: de nuevo värttinä y un grupo de cachondos, los jubilados, que se ponen a hacer versiones de temazos a ritmo de polka, sentados en pupitres y tomando koff.

y nada mas, que los días siguen creciendo y el tiempo corriendo. las reuniones y salidas pseudonocturnas han dado paso a la vida de cesped y es extraño el pequeño vacio ahora que todo el mundo esta en la calle.

de momento mañana esto se llena un poco con agustín, fran, julio, orex, patri y peino camino al norte del norte.


2 comentarios:

Momo dijo...

ains... (suspirito de envidia)

Disfrutaros de mi parte!

mil besos y achuchones, exlanas!

rubén dijo...

qué rebella esa leonor watling finesa!